El costo de alquilar en Rosario sigue en alza y golpea con fuerza a inquilinos y jubilados. Según el último informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso), en marzo los precios de oferta de los departamentos de uno y dos ambientes subieron un 8,7% y un 10% respectivamente en comparación con febrero, mientras que los de tres ambientes se mantuvieron sin cambios.
El informe destaca que estos aumentos mensuales superan la inflación proyectada para el mes, pero que en términos interanuales los incrementos en los tres tipos de unidades siguen por debajo del índice inflacionario general, una tendencia que se observa desde abril del año pasado.
Los números que preocupan
La mediana de precios de los alquileres en Rosario quedó conformada de la siguiente manera:
- Monoambientes: $250.000 (aumento interanual del 66,7%)
- Departamentos de dos ambientes: $330.000 (suba del 78,4%)
- Departamentos de tres ambientes: $400.000 (aumento del 66,7%)
A pesar de estos incrementos, la oferta de unidades disponibles se mantiene en niveles similares a los de marzo de 2024.
Un golpe para los ingresos de jubilados y trabajadores
La situación para jubilados y trabajadores con ingresos mínimos es alarmante. Quienes perciben una jubilación mínima de $349.122 deben destinar el 71,6% de su ingreso solo para alquilar un monoambiente, sin incluir expensas ni servicios.
Peor es el panorama para los trabajadores que cobran el Salario Mínimo, Vital y Móvil ($296.832), ya que deben destinar el 84,2% de su sueldo para pagar un alquiler de un monoambiente, dejando prácticamente nada para otros gastos esenciales.
Además, las expensas representan un gasto extra significativo, con un promedio del 15,8% del costo del alquiler, lo que agrava aún más la situación de los inquilinos.
El Índice de Contratos de Locación sigue en escalada
El Banco Central de la República Argentina publicó el Índice para Contratos de Locación, que refleja un incremento interanual del 150,2% al primer día hábil de marzo, muy por encima de los aumentos en los alquileres ofertados.
Mientras tanto, los inquilinos siguen enfrentando dificultades para hacer frente a los costos y el mercado inmobiliario sigue siendo un terreno complicado, con subas constantes y un acceso cada vez más restringido a la vivienda en Rosario.