Del 21 al 25 de abril, los quirófanos del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) permanecerán cerrados debido a un plan de obras estructurales que apunta a optimizar la atención de patologías quirúrgicas en Rosario. Durante esos cinco días, no se realizarán intervenciones quirúrgicas en el centro de salud más importante de la región en materia de trauma, emergencias y urgencias. La medida fue confirmada por la directora del hospital, Andrea Becherucci, en diálogo con Radio 2.
El cierre responde a la necesidad de avanzar con una serie de reformas esenciales. “Se iniciarán obras para mejorar la prestación en las patologías quirúrgicas en la ciudad. Así también la calidad y seguridad de la atención”, explicó Becherucci. La intervención forma parte de un plan por etapas y, en esta primera fase, implica la clausura temporal de los quirófanos para permitir el corte y renovación de los circuitos de agua que abastecen ese sector sensible del hospital.
Becherucci remarcó que se trata de una reforma de gran magnitud, por lo que resulta indispensable suspender toda actividad quirúrgica durante ese período. En ese sentido, solicitó a la población no acudir de manera espontánea al Heca ante situaciones de emergencia. “Necesitamos que los quirófanos estén cerrados desde el 21 al 25 de abril. Por eso pedimos a la ciudadanía que, durante esos días, las personas con urgencias no se acerquen al hospital por su cuenta”, enfatizó.
Como medida de contingencia, las autoridades del sistema de salud coordinaron con otros hospitales de la región para garantizar la atención de urgencias. El hospital Centenario, el hospital Provincial y el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria estarán operativos para recibir a los pacientes que requieran cirugías de emergencia. Además, el Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) y los servicios privados ya fueron notificados para adecuar sus protocolos de traslado.
Uno de los datos que más preocupa a las autoridades del Heca es la alta proporción de pacientes accidentados que llegan por sus propios medios. Según detalló la directora del hospital, el 30 % de los accidentados en la vía pública se presentan espontáneamente en el nosocomio, sin intervención de un servicio de emergencia. Por eso, Becherucci solicitó expresamente que “ante situaciones como heridas de arma de fuego, heridas de arma blanca, riñas o traumatismos graves, no traigan a las víctimas al Heca. La atención estará derivada a otros centros de salud”.
El objetivo de la obra es fortalecer la infraestructura crítica del hospital y preparar los quirófanos para brindar una atención más segura, eficaz y moderna. Se trata de una inversión necesaria en un hospital que atiende a diario decenas de casos graves, y que se ha consolidado como el centro de referencia para emergencias en toda la región.
Durante estos días de obras, el hospital continuará funcionando en sus demás áreas, pero la actividad quirúrgica estará completamente suspendida. Desde el lunes 21 hasta el viernes 25 inclusive, todos los procedimientos programados quedarán cancelados o serán derivados, según la evaluación clínica.
El llamado de las autoridades es claro: no acudir al Heca de manera espontánea durante esos días, especialmente en casos de urgencia. La red de hospitales públicos ya está preparada para cubrir la demanda que habitualmente concentra el Heca, en un esfuerzo conjunto para evitar colapsos y garantizar la continuidad de la atención.
