Jorge Junco, conocido en el ámbito delictivo por sus reiteradas detenciones como ladrón de medidores de agua, protagonizó un episodio inusual esta semana. En una madrugada que comenzó como otra incursión ilícita más, el joven de 25 años se encontró con una inesperada fortuna: 14 millones de pesos en efectivo. Sin embargo, su efímero momento de riqueza terminó abruptamente cuando fue detenido por la policía apenas 15 minutos después, en una parada de colectivos.
Un giro irónico del destino
Todo comenzó el martes a las 5:15 de la mañana, cuando Junco ingresó a una vivienda en La Paz al 1200, en el barrio Abasto. Según detalló el fiscal César Pierantoni, el ladrón escaló el techo de la propiedad y accedió por una puerta balcón trasera. Una vez adentro, tomó una mochila negra que contenía nueve cheques, sellos de una cooperativa y los 14 millones de pesos. Sin cruzarse con el dueño de la casa, escapó dejando un considerable desorden.
Sin embargo, su suerte fue breve. A las 5:30, en la intersección de Corrientes y 27 de Febrero, Junco fue interceptado por agentes de la Brigada Motorizada. Curiosamente, los policías no lo estaban buscando por el millonario robo, sino porque minutos antes vecinos habían denunciado un robo de cables en la zona. Vestido con un buzo gris que coincidía con la descripción del sospechoso, Junco fue detenido y trasladado a la comisaría.
Un historial delictivo recurrente
La captura de Junco destapó un historial de delitos menores, particularmente hurtos de medidores de agua, que lo habían llevado en varias ocasiones a ser detenido y luego liberado.
Entre los casos más recientes, se destaca el robo de un medidor en Pasaje Nariño al 1900, ocurrido el 21 de diciembre de 2023. En enero de 2024, intentó sustraer una llave de paso de agua en Santiago y Zeballos, pero fue sorprendido por un vecino y debió abandonar la escena, arrojando una mochila que contenía herramientas y ropa.
Días después, el 23 de enero, logró llevarse varios medidores de agua de Renaud al 3400 y Ortiz al 800. Fue detenido nuevamente en Casablanca y Maipú, portando una mochila con cuatro medidores metálicos en su interior.
Un presente judicial complicado
El jueves, Junco fue imputado por una serie de delitos que van desde el robo simple hasta el hurto con escalamiento. En la audiencia, realizada en el Centro de Justicia Penal, el juez Gonzalo Fernández Bussy dispuso prisión preventiva para el joven hasta el 17 de enero de 2025, una medida más benévola que los seis meses solicitados por la Fiscalía.
A pesar de su peculiar hallazgo millonario, el destino de Junco parece marcado por su historial de pequeños delitos y su incapacidad para mantenerse fuera del radar policial. Ahora, su caso despierta una mezcla de incredulidad y curiosidad, reflejando cómo una inesperada fortuna puede durar apenas unos minutos en el mundo del delito.