El gobierno nacional ha dado un paso controvertido al desregular la venta de medicamentos de venta libre, permitiendo su comercialización en cualquier tipo de comercio. Según Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, esta medida busca mejorar el acceso de la población a estos productos y fomentar la competencia en los precios. Sin embargo, en la provincia de Santa Fe, la normativa tiene otra realidad.
Desde el Colegio de Farmacéuticos de Santa Fe, dejaron en claro que esta disposición no tiene efecto en el territorio provincial debido a una ley local que regula estrictamente la venta de medicamentos. Leonardo Jurado, referente del sector, explicó en una entrevista con Radiópolis (Radio 2) que, según la legislación vigente, todos los medicamentos deben dispensarse exclusivamente en farmacias y bajo la supervisión de un profesional farmacéutico.
“La ley provincial que regula el ejercicio de la profesión farmacéutica data del año 1936 y tiene un objetivo fundamental: proteger la salud de la población”, afirmó Jurado. Esta normativa garantiza que los medicamentos, incluso aquellos que no requieren receta médica, sean vendidos en un entorno controlado y con el debido asesoramiento profesional.
Una ley con foco en la salud comunitaria
Jurado enfatizó que permitir la venta de medicamentos fuera de las farmacias podría tener consecuencias negativas para la salud pública. “No podemos decidir qué medicamentos tomar basándonos únicamente en una intuición personal o recomendaciones informales. Siempre es necesario contar con la orientación de un profesional o una consulta médica, según el caso”, expresó.
Además, destacó que la figura del farmacéutico juega un papel crucial en este esquema. “Los farmacéuticos dedicamos años al estudio de las patologías y los medicamentos disponibles en el mercado. Muchas veces, un problema menor puede solucionarse sin necesidad de una consulta médica, solo con el asesoramiento adecuado en la farmacia”, agregó.
El desafío de la competencia y el acceso
Mientras el gobierno nacional defiende la desregulación como una estrategia para ampliar la disponibilidad de medicamentos y reducir costos, los farmacéuticos en Santa Fe sostienen que el acceso no puede desvincularse del control profesional. “La venta de medicamentos no debe tratarse como cualquier otro producto de consumo. Está en juego la salud de las personas, y es crucial evitar el mal uso o abuso de estos productos”, subrayó Jurado.
La ley santafesina, según el profesional, no solo busca regular la venta de medicamentos sino también fomentar una relación de confianza entre el farmacéutico y la comunidad. Este modelo, afirmó, ha demostrado ser eficaz durante décadas.
Impacto nacional y respuesta provincial
La medida nacional promete cambiar el panorama de la venta de medicamentos en el país, pero la resistencia desde provincias como Santa Fe pone de manifiesto los desafíos que enfrenta su implementación. Por un lado, sectores que apoyan la desregulación argumentan que podría beneficiar a consumidores en zonas con menos acceso a farmacias; por otro, está la preocupación de que una venta sin control derive en problemas de salud pública.
En Santa Fe, el Colegio de Farmacéuticos mantiene firme su postura. La venta de medicamentos debe ser profesional, responsable y dentro del marco regulatorio establecido por la provincia.
