La trágica muerte de Sofía Delgado, de 20 años, sacude a la región del Cordón Industrial y plantea interrogantes que las autoridades judiciales intentan desentrañar. La joven fue encontrada sin vida en un camino rural de Ricardone tras 16 días de búsqueda desesperada. Ahora, la Fiscalía de San Lorenzo enfrenta el desafío de esclarecer los roles de los cinco detenidos en este complejo caso.
Los principales sospechosos y una hipótesis inquietante
De los cinco arrestados, las miradas se centran en Alejandro Bevilacqua, un transportista de 35 años con quien Sofía mantenía una relación cercana, según las fuentes judiciales y declaraciones de la querella. Bevilacqua fue detenido junto a su pareja, Miranda Leguizamón (29), en Pergamino, en un operativo que incluyó el secuestro de un «kit sado» y juguetes sexuales que podrían estar relacionados con la muerte de la joven.
El abogado querellante Fernando Virgili sugirió que el desenlace fatal podría haber ocurrido en un contexto de consumo de drogas y prácticas sexuales, una hipótesis que aún debe ser validada o descartada por el fiscal Carlos Ortigoza en las próximas audiencias.
La autopsia y los hallazgos preliminares
El informe inicial de la autopsia indica que Sofía murió por asfixia mecánica. Su cuerpo estaba amarrado con precintos en brazos y piernas, un detalle que subraya la brutalidad del crimen. Además, se preservaron muestras para analizar la presencia de sustancias estupefacientes y otros rastros biológicos que podrían aportar más pistas sobre lo ocurrido.
Aún no se determina el lugar exacto donde se produjo el asesinato, aunque la principal hipótesis es que ocurrió poco después de su desaparición el 30 de octubre.
El papel de los otros detenidos
Además de Bevilacqua y Leguizamón, otros tres sospechosos están bajo custodia: Eduardo Mordini, Brian Bauman y Natalia Palavecino. Mordini, un mecánico de la zona, es señalado como pieza clave en el caso, ya que habría proporcionado la ubicación del cuerpo durante su detención. Según las fuentes, solía consumir drogas con Bevilacqua y podría haber tenido un rol directo en la muerte de Sofía.
Bauman, empleado de Mordini, y Palavecino, pareja del mecánico, también están involucrados, aunque su grado de participación aún es incierto.
Un vehículo clave, un Peugeot 308 captado por cámaras de seguridad cerca del domicilio de Sofía la última vez que fue vista con vida, fue incautado en el taller de Mordini. Aunque Bevilacqua utilizaba este auto, no era de su propiedad, lo que complica aún más la reconstrucción de los hechos.
La relación entre los implicados y Sofía
La investigación apunta a que Sofía tenía una relación esporádica con Bevilacqua, descrita como cercana y amorosa, según la abogada querellante Noelia Borletto. Sin embargo, el contexto en el que ambos se reunieron la última vez es todavía un misterio, y uno de los ejes del trabajo de los fiscales será determinar si ese encuentro fue consensuado o forzado.
Por su parte, Miranda Leguizamón, pareja de Bevilacqua, se encuentra embarazada de seis meses y mantenía una relación conflictiva con él. Su implicación en el caso y su conocimiento de los hechos son aspectos que la Fiscalía buscará esclarecer.
El próximo paso: las audiencias imputativas
La audiencia donde se presentarán las imputaciones será clave para conocer las estrategias del fiscal Ortigoza y las defensas de los sospechosos. Las declaraciones de los familiares de Sofía, quienes señalaron a los detenidos, podrían ser determinantes para construir la teoría del caso.
Mientras tanto, los investigadores se enfocan en el análisis de los teléfonos móviles de los implicados, que podrían arrojar luz sobre lo ocurrido durante los últimos momentos de vida de Sofía.
Un caso que conmociona y exige justicia
El femicidio de Sofía Delgado no solo sacude a Ricardone y al Cordón Industrial, sino que resalta la urgente necesidad de justicia en un contexto de violencia de género que no da tregua. Las próximas semanas serán decisivas para desenredar esta oscura trama, identificar a los responsables y garantizar que este brutal crimen no quede impune.
