El martes por la noche, la tranquilidad de la Ruta 21, a la altura de General Lagos, se vio alterada por un trágico accidente en el que un motociclista perdió la vida. El hecho ocurrió en el kilómetro 72, alrededor de las 21:20 horas, cuando un conductor que circulaba por la zona alertó a la Policía sobre lo que parecía un grave siniestro vial. Al llegar al lugar, los agentes constataron el peor escenario: un hombre yacía sin vida en el asfalto, a escasos metros de una motocicleta Royal Enfield de 500cc.
La víctima, identificada como Leonardo S., habría sido originario de la localidad de Arroyo Seco, y su cuerpo fue trasladado al Instituto Médico Legal para la realización de la autopsia, bajo las directrices del fiscal Walter Jurado. Sin embargo, el trágico accidente no parece haber sido un caso de pérdida de control o un siniestro en solitario. Fuentes cercanas a la investigación han revelado que, de acuerdo con los resultados preliminares de la autopsia y otras pericias forenses, todo indica que hubo otro vehículo involucrado en el fatal desenlace, aunque los detalles sobre este segundo implicado siguen siendo un misterio.
El hallazgo y la primera hipótesis
La secuencia que llevó a la Policía a descubrir el cuerpo comenzó cuando un automovilista que circulaba por la Ruta 21 divisó la escena y dio aviso a las autoridades. Este testigo informó haber visto a un hombre tendido sobre el pavimento, con su moto a pocos metros de distancia, en lo que claramente parecía un accidente de tránsito. Minutos después, los efectivos policiales llegaron al lugar y, tras confirmar la muerte del motociclista, comenzaron a recopilar pruebas en la escena para entender lo que había ocurrido.
La motocicleta, una Royal Enfield de 500cc, quedó tirada a poca distancia del cuerpo, en lo que parecía una primera indicación de que la víctima podría haber caído de la moto. Sin embargo, con el paso de las horas y los resultados de la autopsia, la investigación comenzó a inclinarse hacia la posibilidad de que el siniestro involucrara a otro vehículo.
La Policía y los investigadores trabajaron en la madrugada y primeras horas del miércoles para obtener más información, en un esfuerzo por identificar al otro vehículo que pudo haber estado involucrado en el accidente. Aún no se ha podido confirmar si se trató de un choque o una maniobra en la que el segundo vehículo pudo haber contribuido a la caída del motociclista.
Investigación en curso y el llamado a testigos
El fiscal Walter Jurado, a cargo de la investigación, ha ordenado diversas pericias para esclarecer lo ocurrido. Entre ellas, la revisión de cámaras de seguridad de la zona y la recolección de testimonios que puedan aportar datos sobre el otro vehículo que se presume estuvo involucrado en el accidente. La colaboración de testigos será fundamental para lograr avances en el caso, ya que hasta el momento no se ha identificado al conductor ni al vehículo sospechoso.
Por el momento, las autoridades no han descartado ninguna hipótesis y se trabaja con la posibilidad de que el segundo vehículo implicado haya abandonado la escena del accidente sin prestar asistencia, lo que podría configurar un delito de abandono de persona.
El accidente fatal ha dejado conmocionada a la comunidad de Arroyo Seco, de donde era oriunda la víctima. Los vecinos y amigos de Leonardo S. lo recuerdan como una persona apasionada por las motos, lo que ha añadido una capa de dolor a la tragedia.
Un sector peligroso de la Ruta 21
El kilómetro 72 de la Ruta 21, donde ocurrió el accidente, es una zona que ha sido señalada por los conductores como peligrosa debido a la falta de iluminación y señalización en ciertos tramos. Si bien las condiciones exactas del accidente aún no han sido determinadas, este factor ha generado preocupación entre quienes transitan con frecuencia por la ruta.
Los motociclistas, en particular, están más expuestos a los riesgos que representan las malas condiciones viales y el comportamiento imprudente de otros conductores. Las autoridades instan a los conductores a extremar las precauciones, especialmente durante la noche y en tramos poco iluminados como el de General Lagos.
Este triste episodio se suma a una serie de accidentes que han ocurrido en las rutas que rodean Rosario, lo que ha llevado a muchos a pedir mejoras en la infraestructura vial y un mayor control de la velocidad y el respeto por las normas de tránsito.
Por ahora, la comunidad y la familia de la víctima solo pueden esperar justicia mientras avanza la investigación para esclarecer los detalles que rodean la muerte de Leonardo S., un motociclista cuya vida se apagó trágicamente en la Ruta 21.