Hidrovía: el Gobierno espera una licitación competitiva con tres grandes oferentes

El Gobierno nacional confirma que al menos tres grandes empresas internacionales se preparan para competir en la licitación de la hidrovía, lo que genera expectativas tanto en el sector empresario como en la gestión de Javier Milei. La belga Jan de Nul, actual operadora del sistema, la holandesa Van Oord y la también belga Dredging International son las principales candidatas para disputar la administración del sistema troncal de navegación.

La posible participación de Dredging International es toda una sorpresa. La empresa había cuestionado duramente el proceso licitatorio en marcha, llegando incluso a presentar denuncias en la Justicia y en sede administrativa por supuestas irregularidades en la convocatoria. Sin embargo, lejos de retirarse, ahora planea presentar una oferta económica agresiva para quedarse con el contrato.

Este giro es interpretado como un triunfo político para el Gobierno. Desde el Ministerio de Economía se había definido que, en caso de presentarse una sola oferta—como se esperaba que ocurriera con Jan de Nul—la licitación sería dada de baja. Sin embargo, la competencia entre al menos tres jugadores permitirá que el proceso avance con mayor legitimidad y competitividad.

Para los usuarios de la vía navegable (navieras, exportadores y puertos), esta mayor participación es clave. Creen que solo con una puja real entre oferentes se logrará una mejora en la tarifa del peaje, ya que los precios de referencia actuales son vistos como elevados.

El factor Boskalis y la estrategia gubernamental

Una de las grandes ausentes en la licitación será la holandesa Boskalis, que junto a Jan de Nul y Dredging era uno de los principales actores en la competencia. La empresa decidió bajarse de la carrera, argumentando discrepancias con los términos del pliego. Sin embargo, en la industria se interpreta que su salida responde más a una cuestión de estrategia: Boskalis había presionado para dividir la hidrovía en al menos dos tramos, lo que le habría dado una ventaja competitiva sin exponerse tanto en la región.

Desde el Gobierno insisten en que el proceso es transparente y competitivo. En un documento de 88 páginas fechado el 4 de febrero, la Agencia Nacional de Puertos y Navegación desestimó la denuncia de direccionamiento presentada por Dredging International y detalló que hubo ocho dragadoras analizando la licitación. Este punto es clave para disipar temores sobre una falta de interés en la convocatoria.

“Los pliegos se ajustan a los principios de transparencia, igualdad de oportunidades, eficiencia económica y concurrencia establecidos en la legislación nacional”, sostiene el informe oficial, que además destaca la importancia del proyecto para el desarrollo portuario y económico del país.

Expectativas de cara al 12 de febrero

El próximo miércoles 12 de febrero se abrirán los sobres con las ofertas económicas, una instancia clave para definir el futuro de la hidrovía. Si finalmente se confirma la participación de Dredging International junto con Jan de Nul y Van Oord, el Gobierno logrará imprimirle mayor solidez institucional al proceso y evitará el escenario de una licitación con un solo oferente.

El resultado de esta licitación no solo impactará en la infraestructura portuaria, sino también en la competitividad del comercio exterior argentino. Con la hidrovía como vía clave para las exportaciones, la definición de su nuevo operador marcará el rumbo del transporte fluvial en los próximos años.