El presidente argentino Javier Milei sorprendió con un giro estratégico en su política exterior al confirmar que viajará a China para «profundizar la relación comercial» con el gigante asiático, a pesar de las fuertes críticas que había realizado durante su campaña electoral contra los acuerdos con el país asiático. Asimismo, adelantó que podría reconsiderar la permanencia de Argentina en el Mercosur si este bloque regional obstaculiza un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos.
Desde Davos, Suiza, donde participa en el Foro Económico Mundial, Milei explicó su cambio de postura respecto a China en una entrevista con Bloomberg: «Uno tiene que aprender», afirmó, reconociendo que ambos países tienen un gran potencial para trabajar de manera conjunta. El mandatario subrayó que está planeando una visita oficial a China con el objetivo de fortalecer los lazos comerciales entre ambas naciones.
Una nueva etapa en la relación con China
Milei destacó que durante la cumbre del G20 en Brasil tuvo un encuentro positivo con el presidente chino Xi Jinping y funcionarios de la embajada china. «Consideramos que somos economías complementarias y que tenemos mucho para hacer juntos. Son grandes socios comerciales y, por lo tanto, la contracara de esos swaps tiene que ver con situaciones comerciales», señaló.
Estas declaraciones marcan un contraste significativo con su discurso de campaña, en el que había descalificado a China por su sistema político. Ahora, su enfoque parece priorizar los intereses económicos y comerciales, dejando de lado las diferencias ideológicas.
El dilema del Mercosur y el libre comercio con Estados Unidos
Por otro lado, el presidente argentino dejó abierta la posibilidad de abandonar el Mercosur si fuera necesario para avanzar en un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, aunque aclaró que esta sería una «condición extrema». Milei sostuvo que hay mecanismos que permitirían mantener la integración con el bloque regional mientras se busca un entendimiento comercial con la administración de Donald Trump.
“Creemos que se puede lograr sin tener que abandonar lo que se tiene en materia de Mercosur”, afirmó. En ese sentido, desestimó el argumento de que la salida del bloque podría perjudicar al sector automotriz, ya que, según indicó, este opera bajo acuerdos específicos independientes del Mercosur.
Apertura comercial como motor de prosperidad
En su discurso, Milei reiteró su visión de que la apertura al comercio internacional es clave para impulsar el crecimiento económico de Argentina. «Estamos explorando la manera de que Argentina se pueda abrir al comercio internacional porque la división del trabajo trae prosperidad», sostuvo.
La estrategia del mandatario busca posicionar al país en el escenario global con una política más orientada hacia acuerdos bilaterales y una mayor integración en cadenas de valor internacionales. Sin embargo, este enfoque también podría generar tensiones en el ámbito regional, particularmente con los países miembros del Mercosur, que han priorizado históricamente la cooperación intrabloque.
El desafío de equilibrar intereses
El cambio de rumbo en la política exterior de Milei plantea un desafío complejo: mantener relaciones equilibradas con los principales socios comerciales de Argentina, como China y Brasil, mientras se avanza en acuerdos estratégicos con Estados Unidos.
Con este nuevo enfoque, la administración de Javier Milei busca posicionarse como un actor dinámico en el comercio global, dejando de lado discursos ideológicos para priorizar los intereses económicos. Sin embargo, el impacto de estas decisiones en la economía nacional y en las relaciones regionales será un tema clave en el corto y mediano plazo.
