Ocho millones de pesos de recompensa para dar con los asesinos de Magdalena Acosta

El gobierno provincial ofrece una recompensa de ocho millones de pesos a quienes puedan brindar información que permita detener a los responsables del brutal asesinato de Magdalena Acosta, la mujer de 74 años que fue acribillada el 21 de abril de 2022 en barrio Ludueña. El crimen, que conmociona aún hoy a Rosario, ocurrió tras un simple reclamo de la víctima a dos motociclistas que circulaban a alta velocidad frente a su casa.

La investigación, a cargo del fiscal de Homicidios Dolosos Patricio Saldutti, continúa en curso, y el Ministerio Público de la Acusación (MPA) habilitó varios canales de comunicación para recibir información que pueda esclarecer el caso. Aquellas personas que tengan datos relevantes pueden comunicarse al 911, a la unidad de Homicidios Dolosos, enviar un correo electrónico a psaldutti@mpa.santafe.gov.ar, o contactarse a través de las redes sociales de la Fiscalía.

El MPA aseguró que toda la información será manejada con absoluta reserva, garantizando que la identidad de los informantes y de los beneficiarios de la recompensa será protegida en todas las etapas de la investigación y el proceso judicial.

Un crimen atroz en Ludueña

El trágico hecho tuvo lugar en Pasaje Rafaela al 5200. Según reconstruyó la investigación, aquella tarde del 21 de abril, Magdalena Acosta estaba sentada en la puerta de su casa junto a su nieta Cielo, de apenas 9 años en ese momento, cuando dos motos con dos ocupantes cada una pasaron a alta velocidad. Los vehículos, según testigos, venían derrapando y efectuando disparos en la esquina.

El simple pedido de Magdalena, intentando proteger a los niños del barrio, fue lo que desató la furia de los atacantes. “Ey, paren un poco que están las criaturas, no anden tan fuerte”, habría sido la frase que encendió la tragedia. Según relató Natalia, hija de la víctima, uno de los motociclistas dio la orden con total frialdad: “Dale, dale, matá a la vieja, matá a la nena, matá a todos”.

Acto seguido, comenzaron a disparar indiscriminadamente. Magdalena Acosta recibió múltiples impactos de bala y murió en el lugar. La pequeña Cielo, por su parte, sufrió un disparo en una pierna que le provocó una fractura. La balacera fue tan intensa que un vecino tuvo que fingir estar muerto para evitar ser alcanzado por los tiros.

La impunidad que indigna

Natalia, visiblemente conmovida en declaraciones a El Tres, recordó el horror de aquel día y reclamó justicia por su madre. Mientras tanto, la comunidad de barrio Ludueña aún carga con la angustia de un hecho que expone las profundas problemáticas de violencia que azotan a la ciudad.

La recompensa ofrecida por el gobierno provincial busca dar un giro en la investigación y aportar herramientas concretas para que los responsables del crimen sean identificados y llevados ante la justicia. La Fiscalía apuesta a que el incentivo económico motive a quienes puedan aportar información clave sobre los atacantes.

Un llamado a la colaboración

Las autoridades insisten en que cualquier dato, por mínimo que parezca, puede resultar fundamental para resolver el caso. La protección de la identidad de los informantes está garantizada, y se recuerda que el silencio solo perpetúa la impunidad.

Mientras la investigación sigue su curso, la imagen de Magdalena Acosta, una abuela que solo intentó defender a su nieta y a los niños del barrio, permanece como símbolo de una ciudad que pide respuestas y justicia.